Familias de Sala Roja
Hace una
semana hemos compartido la experiencia de la Escuela Abierta. Allí pudimos observar
con las familias diversos cuentos, crear los propios a partir de imágenes y
disfrutar de un viaje a “El país de los cuentos” compartiendo la historia “Relatos
de Familia” de Isol.
Desde la
institución y desde la educación en general se considera que es muy relevante
la relación entre el libro y el juguete; así, los libros que realmente llegan
al corazón de los niños están en el lugar del juguete. Para Gianni Rodari
(escritor infantil), por ejemplo, “definir el libro como ‘un juguete’ no
significa en absoluto faltarle al respeto, sino sacarlo de la biblioteca para
lanzarlo en medio de la vida, para que sea un objeto de vida, un instrumento de
vida”.
Por esta vía
entramos en el terreno del juego. El juego es aquella actividad creadora por
excelencia, aquella en la que el niño recrea el mundo, construye uno propio,
valiéndose de la imaginación y de los recursos que aporta su realidad. Por
ello, diferentes teóricos han afirmado que el juego, contrario a lo que
popularmente se cree, es la actividad más seria del niño, es central en la
infancia, posibilita la construcción de su “yo” y modos de enfrentar el
mundo.
Los
libros cuentan historias, narran sucesos reales o fantásticos, ellos se nutren
tanto de la imaginación como de la relación con la realidad de quien escribe.
En esas narraciones comunican aspectos esenciales de la humanidad. Ningún
otro medio logra transmitir lo que transmite una historia bajo la forma de un
cuento, fábula, novela, teatro o poesía. Este hecho ha sido sustentado por
distintos autores como Martha Nussbaum, Michele Petit y Jerome S.
Brunner, por ello consideran esencial la presencia de la literatura en la
infancia, es la posibilidad de que los “niños se apropien del mundo a través de
las palabras”.
Es por
eso que en estas vacaciones de invierno los invito a disfrutar en familia de
espacios de literatura, de teatro, de cine… porque en todos estos espacios
prima la imaginación, las ganas de crear y, por supuesto, las ganas de jugar. Compartir
tiempo es lo mejor que les podemos brindar a nuestros hijos, no hay nada más
valioso que la compañía y la escucha atenta.
Les deseo que las disfruten y nos vemos a la vuelta
Comparto con ustedes algunas fotos de la Escuela Abierta
Devon 2018.
Srita. Paula